Lo Que No Se ve




Un año va envejeciendo, con la rapidez suficiente para seguir sorprendiéndonos en un estado grato y a veces agridulce molde de la vida.

Un molde que va cambiando su forma y puede que delicadeza con el transcurrir de los mismos, pero el cual nunca pierde la base, su esencia.

En el nuevo que nunca nos deja de agradar, encerramos las suficientes alegrías, ilusiones y metas para cumplir… tanta, que ya de por si no podemos contener tanta emoción.

Las mismas que nos prometemos a nosotros mismos que serán cumplidas esta vez, que no serán aplazadas, reemplazadas u olvidadas como en el anterior.



Las mismas que oxigenan nuestra alma, para así hacerla más radiante ante las adversidades que se nos presentan, y poder así hacerles frente con la mejor de las energías y con el mejor de los brillos.

Cada goteo incesante de alegrías y penares siguen su curso, sin darse cuenta a quien pueda afectar, motivar e incentivar…., cada día crece en la belleza de quien la sepa observar.

Tras un giro rápido de muñeca, tras un movimiento sutil de manos, que se deslizan sobre un teclado, no intento imaginar cómo será el próximo que se nos presenta, cual serán las alegrías que nos esperan….

…. que será lo que tendremos que aguantar e incluso que penurias tendremos que realizar o que nos machacara en ese nuevo camino de aprendizaje continuo.

Intento simplemente no pensar demasiado, plasmar o atrapar una pequeña parte de un instante que me apremia e ilusiona…

…dejar que mi lado creativo se alimente de la mejor manera que pueda, vislumbrar el lado más brillante y positivo de las cosas.

Desde mi punto de vista, y por supuesto de una manera personal creo, que el mayor freno que nos ponemos a nosotros mismos es la propia capacidad o creencia de que no podemos hacer o realizar.

La ilusión subió un escalón hacia nuestra mas merecida atención, nuestro desempeño se enfoca en el aprendizaje y creencia de nuestros mejores sueños y solo en la mezcla de ambos hará que esa creencia se convierta en toda una realidad.



La capacidad creadora de toda criatura es el mayor tesoro con el cual podemos vivir y sobre todo compartir, no te quedes con lo que tienes, no lo congeles por muy bueno y enriquecedor que sea ,crea una buena base y una vez se firme y consistente…

..una vez que confíes en ella, desarrolla como la mejor de las inversiones en las cuales creer y crecer en esta oportunidad que se nos ofrece…la misma que nos permite compartir la mejor de nuestras ilusiones y sobre todo de transformarlas en la mejor de las realidades.

Atrévete a soñar, pero no solo cuando duermas…es mejor soñar despierto que nunca haberlo hecho…



….solo así podrás recoger los frutos que endulzaran no al mejor de los paladares sino a la mayor parte de tu alma.

¿no lo crees enriquecedor?


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